Este siete de agosto finaliza el gobierno del presidente Juan Manuel Santos, quien deja el cargo en medio de la polarización que se generó en el país a raíz de muchas de sus decisiones. Algunos de sus detractores nunca le perdonaron su postura ante el proceso de paz con las Farc, en cambio, sus defensores le destacan el haber alcanzado un acuerdo con la que era la guerrilla más antigua del continente.
El acuerdo de paz con las Farc será probablemente el tema más recordado y debatido de su gobierno, sin embargo, en estos cuatro años de su segundo mandato fueron varios los aspectos positivos o negativos que salieron a relucir a la opinión pública.
En Canal Capital hicimos un recuento de algunos de los momentos más felices y los cinco más difíciles que Juan Manuel Santos enfrentó en estos cuatro años.
Los gozosos:
El Nobel de paz: Juan Manuel Santos se convirtió en el primer colombiano en obtener un Nobel de Paz. Tras más de cuatro años de negociaciones con la guerrilla de las Farc, Santos decidió someter el acuerdo a la aprobación de los ciudadanos a través de un plebiscito, en el que el ‘Sí’ perdió con el 49,79%, frente al ‘No’, que obtuvo el 50,21% de los votos.
Después de esta derrota parecía imposible soñar con el nobel, sin embargo, fue su actitud frente a la derrota la que le terminó otorgando el galardón.
Según el comité del Nobel, luego de perder el plebiscito, Juan Manuel Santos invitó a los líderes del no en una serie de largas reuniones en las que se debatieron los puntos más polémicos del acuerdo, el cual posteriormente fue modificado con algunas de las conclusiones de estas discusiones.
Honoris causa: Durante su gobierno, Juan Manuel Santos recibió gran cantidad de reconocimientos a nivel internacional dentro de los que se destacan cuatro doctorados Honoris Causa, un título de honor que otorgan las universidades a aquellas personas destacadas en alguna materia o ámbito, en este caso la lucha por la paz.
Santos cuenta entonces con el título de doctor Honoris Causa en Humanidades por la Universidad de Kansas, por la Universidad Sorbona Paris 1, por la Universidad Nueva de Lisboa y por la Universidad Alfonso X El Sabio de España.
Relaciones internacionales: Santos le deja al país unas relaciones internacionales fortalecidas, en parte por el apoyo que la mayoría de los líderes del mundo, como Obama, Ban Ki-moon, entre otros, le brindaron ante el acuerdo de paz con las Farc. Así mismo muchos países contribuyeron con aportes económicos para el posconflicto como Noruega, Alemania, Canadá, el Reino Unido, entre otros.
Sin embargo uno de los logros más destacados en materia internacional en el gobierno de Juan Manuel Santos es el ingreso de Colombia a la OCDE, considerado el club de los países desarrollados, el cual se espera aporte en mejorar la competitividad, potenciar la productividad, superar la pobreza y mejorar la educación.
De igual importancia es el Ingreso a la OTAN, una alianza de países europeos y norteamericanos que constituye un sistema de defensa colectiva.
Finalmente, es de destacar también que ya son 74 países y 14 territorios no estatales que permiten el ingreso a los colombianos por periodos cortos presentando su pasaporte, sin necesidad de tramitar la visa.
Reducción de muertes: El proceso de paz previno, al menos, la muerte de 2.796 personas, de acuerdo con el informe periódico del Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos (CERAC).
De igual manera el diario británico ‘The Economist’ destacó en un artículo en julio de este año que La tasa de homicidios se redujo en un 35%, y el historial de derechos humanos del país ha mejorado.
El 2017, por ejemplo, fue el año que pasó a la historia como el más seguro en cuatro décadas, con una reducción del 12% en homicidios con respecto al 2016 y entre 2010 y 2017 se presentó una reducción de más de 4000 mil muertes
Vivienda gratis: el Gobierno de Santos se había comprometido con la construcción de 1,5 millones de viviendas posteriormente dijo que terminaría su mandatos con 1,7 millones.
Actualmente el Gobierno superó esa meta, ya que se inició la construcción de 1 millón 750 mil viviendas en todo el país, beneficiando a más de 5 millones de colombianos.
De igual forma, también se sobrepasó la proyección de 130.000 viviendas gratis que se iban a entregar y la cifra alcanza ya las 272.000 en el país.
Infraestructura: En numerosas ocasiones el presidente Sanos ha resaltado su labor en materia de infraestructura, según el para contribuir a que el país esté más conectado y sea más competitivo.
Dentro de estos avances se destacan: El avance del programa de las vías de cuarta generación, la inversión y estado de vías regionales (conocidas como vías terciarias), la conclusión de las obras del Cruce de la Cordillera Central y Puente Pumarejo, y los proyectos estructurados, más de 30, para que el próximo gobierno entregue.
La inversión total en la Revolución de la Infraestructura en el país asciende a 100 billones de pesos, de los cuales 15 billones de pesos corresponden a la Región Oriental, es decir un 19 por ciento del total.
Específicamente, hay 30 concesiones de cuarta generación (4G) en marcha, 15 de ellas con cierre financiero y 9 en la Región Oriental. De las concesiones de cuarta generación, el 40 por ciento ya fue finalizado y el 60 por ciento está en proceso.
Los dolorosos:
Plebiscito: Uno de los momentos más difíciles para Juan Manuel Santos y su gobierno fue la derrota en el plebiscito que refrendaría los acuerdos de paz con las Farc. El mandatario ha reconocido en varias ocasiones que no tenía un plan b ante esta posibilidad, ya que le parecía imposible que ganara el ‘No’.
El ‘No’ ganó gracias al trabajo de la oposición liderada por el expresidente Álvaro Uribe Vélez, quien no compartía la forma en que el Gobierno negociaba con este grupo armado. Algunos de los puntos más polémicos y criticados eran la participación política y el sistema de justicia transicional, lo que según ellos otorgaría impunidad a los guerrilleros.
Corrupción: Grandes escándalos de corrupción salieron a la luz durante su Gobierno. El primero y el más sonado fue el de Odebrecht, que según se conoció habría dado dinero a las campañas presidenciales de Óscar Iván Zuluaga y Juan Manuel Santos en el 2014.
Roberto Prieto, gerente de la campaña de reelección de Santos, fue investigado por estos hechos por la Fiscalía, que le imputaron cinco delitos, porque al parecer la multinacional brasilera habría pagado 2.000 afiches para la campaña de Santos en 2014.
Actualmente la investigación contra la campaña de ‘Santos Presidente 2014’ fue archivada y por su parte el mandatario afirmó que nunca tuvo conocimiento sobre estos supuestos hechos.
Otro escándalo que explotó durante su gobierno fue el de `Reficar’ en el cual los sobrecostos sumaron, según lo ha advertido la propia Contraloría General de la Nación, más de $4.000 millones de dólares.
Al respecto, Santos aseguró que esos hechos ocurrieron antes de agosto de 2010, cuando asumió la presidencia, pero que si en su gobierno había alguien responsable sería juzgado con todo el peso de la ley.
Cultivos ilícitos: Juan Manuel Santos al salir de la presidencia deja al país enfrentando un aumento en los cultivos ilícitos. Durante su administración se suspendieron las fumigaciones aéreas por recomendación del Ministerio de Salud debido a los efectos que podría tener sobre la población,la flora y la fauna.
Esto, según expertos condujo a un aumento en estos cultivos, sumado a la expectativa que dejó en los campesinos el proceso de paz y la promesa de la sustitución de cultivos, que creo en la población la idea de que entre más sembrarán, mejor iban a ser recompensados a la hora de sustituirlos.
Durante 2017, los cultivos ilícitos en el país aumentaron 11 %, según la Oficina de Política Nacional para el Control de Drogas de la Casa Blanca, alcanzando las 209.000 hectáreas.
Sin embargo, según el Ministerio de Defensa, al inicio de 2018 la meta de la Fuerza Pública era erradicar 30.000 hectáreas entre el primero de enero y el 7 de agosto, lo cual ya se cumplió.
Impopularidad y polarización: Es importante recordar que Juan Manuel Santos llegó a la presidencia en el 2010 con el apoyo del expresidente Àlvaro Uribe, quien después tomó distancia del mandatario debido a varias de sus políticas.
Muchos de los ciudadanos que votaron por Santos, se sentían ‘traicionados’ al ver que la relación con Uribe se rompió, ya que habían votado por la continuidad de la política de seguridad democrática que había atacado de frente a guerrillas como las Farc.
Cuando Santos anunció el proceso de paz con este grupo armado, las diferencias fueron más amplias y durante todo su mandato el expresidente mostró una férrea oposición.
Esto género que el país se dividiera en quienes apoyaban el proceso de paz y quienes querían modificarlo. Lo cual se hizo evidente en el plebiscito donde el margen entre una votación y otro fue estrecho.
Por otro lado, las encuestas revelaban un rechazo contra el Juan Manuel Santos. El punto más alto fue en abril cuando la cifra de desaprobación alcanzó a su punto máximo: 73%.
Santos deja este martes la presidencia con una aprobación del 22% según la encuestadora Yanhaas, luego de alcanzar el pico más alto de popularidad con el 58% luego de firmar la paz con las Farc en septiembre de 2016.
Disidencias y asesinatos a líderes sociales: A pesar de que la reducción de muertes violentas en el país fue considerable, los problemas de orden público continúan. Uno de los retos que deberá enfrentar el próximo presidente será el asesinato a líderes sociales que aumentó en los últimos meses.
Según el más reciente informe de la Defensoría del Pueblo, entre el 1 de enero de 2016 y el 31 de julio de 2018, eran 331 los líderes sociales asesinados, sin embargo esta cifra no para de crecer y desde que se firmó la paz con las Farc, son más comunes estos homicidios.
De igual forma, la implementación de los acuerdos de paz con las Farc, deja la problemática de las disidencias, grupos al margen de la ley que no aceptaron desmovilizarse cuando se firmaron los acuerdos de La Habana y el Gobierno de Colombia.
De acuerdo a cifras de Fundación Ideas para la Paz habría un total de 100 a 1.000 disidentes, sin embargo, el estudio también reveló que entidades no coinciden en las cifras de las disidencias. Por ejemplo la Vicepresidencia asegura que existen de 250 a 400 personas, mientras que la Defensoría afirma que en el conteo encontró a 800 hombres.