El Tropicario: el invernadero más grande de Latinoamérica en el corazón de Bogotá

Parece sacado de una película futurista y es una de las estructuras más fascinantes de la ciudad. El Tropicario, ubicado dentro del Jardín Botánico de Bogotá, es un espacio innovador donde se recrean seis ecosistemas tropicales colombianos en domos de vidrio. Allí, los visitantes pueden sumergirse en bosques húmedos, páramos, zonas desérticas y humedales, viviendo de cerca la biodiversidad del país.

Más que un atractivo turístico, el Tropicario es un centro de conservación, educación ambiental e innovación científica. Su misión es preservar la flora nativa, generar conciencia sobre la importancia de los ecosistemas y fomentar la participación comunitaria en el cuidado del medioambiente.

Más que un atractivo turístico, el Tropicario es un centro de conservación, educación ambiental e innovación científica. Su misión es preservar la flora nativa, generar conciencia sobre la importancia de los ecosistemas y fomentar la participación comunitaria en el cuidado del medioambiente.

Laura María Rodríguez, diseñadora industrial, es una amante de la naturaleza que, además de cuidar sus propias plantas, participa activamente en la defensa de espacios verdes en su comunidad. Para ella, lugares como el Tropicario son esenciales para reconectar con la biodiversidad y entender su valor.

Moisés Palacios Rodríguez, ingeniero forestal de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, es uno de los expertos a cargo del Tropicario. Con una carrera enfocada en la conservación y gestión de ecosistemas, lidera los esfuerzos para proteger y estudiar la flora en uno de los centros botánicos más importantes de Colombia.

El Tropicario no solo es un pulmón verde para Bogotá, sino también un espacio de aprendizaje, admiración y conciencia sobre la riqueza natural que el país tiene para ofrecer.